Los 88 Caracoles
Lluís Companys: El Paseo de los 54 dragones parte IV.
Cuando antiguamente un arquitecto diseñaba caracoles en uno de sus trabajos era un mensaje bien claro.
Un ejemplo bien claro es el de la Catedral. Pero eran discretos difíciles de ver o escondidos, tenías que saber de dónde venía o buscarlo.
Pero que un arquitecto municipal pusiera 88 bien visibles y a la altura de la cabeza, casi, que no cuesta ver nada de nada…
Eso si sabes multiplicar son 176 cuernos dirigidos a alguien… quién sería. Y si os fijáis más, depende de cómo lo mires, parece que te enseñe hasta el culete.